sábado, 14 de septiembre de 2013

lunes, 26 de agosto de 2013

¡Cómo te iba a querer!








¡Cómo te iba a querer!



¡Ah, si estuvieras cerca!
¡Cómo te iba a querer!
Te querría con dulzura,
con ilusión,
con ternura,
con aire tibio de otoño que sabe de mis anhelos.
Como quieren los amantes sinceros,
sin interés,
sin pedir a cambio nada.
¡La ilusión también se paga!
Por ella que se había ido.
¡Cómo te iba a querer!




Ycíar

sábado, 25 de mayo de 2013

Mis manos



Mis manos

Creo que mis manos
siempre fueron afanosas.
Vivieron preocupadas
saltando y multiplicándose con gracia
por la casa;
entrando y saliendo de cajones,
jugando entre colchas y almohadas.
¡Cuántos libros ojearon
y cuánto mimaron mis plantas!
A veces se miraban asustadas
al llegar el domingo;
-el descanso las aturdía y agobiaba.

¿Qué querrían mis manos, qué ansiaban?
¡Si de todo tenían!
¡¡Si a todo llegaban!
¡Si de noche dormían!
¡Si de día cantaban!
¿Qué querrían mis manos, qué ansiaban?

Hoy mis manos afanosas
no han querido correr por la casa,
ni abrir las ventanas
ni mimar las plantas.

Quizá han pensado que no tienen prisa,
que nadie las llama.
¿Para qué apurarse si no estás en casa?
¡Si no está tu pelo!
¡Si no está tu cara!
¡Si no están tus manos para acariciarlas!
Ycíar

viernes, 3 de mayo de 2013

Dedicado a mi querida tierra allerana




¡Tierra Mïa!


Tierra mía,
ensin recios llimoneros,
ensin llánguidos naranxos
nun güeles a azahar.

Tierra mía,
ensin cánticos de foles,
les tos llárimes azules
nun les arrulla´l mar.

Tierra mía,
dueña de la mio melancolía,
musa del mio versu y la mio poesía.

L´anxel qu´en ti alienda
trina nel mio despertar,
alluma´l mio senderu,
alivia la mio ansiedá
y mece ente la to yerba
la mio allegría infantil,
güei olvidá,
la que con tibiu besu
recobraré
                cuando dorma nel tu senu reposá                         



¡Tierra mía!
 
 
  
¡Tierra mía!
Sin recios limoneros,
sin cálidos naranjos
no hueles a azahar.

¡Tierra mía!
Sin cánticos de olas,
tus lágrimas azules
no las arrulla el mar.

¡Tierra mía!
Dueña de mi melancolía.
Musa de mi verso y poesía

El ángel que en ti alienta
trina en mi despertar,
perfuma mi sendero,
alivia mi ansiedad.
Y mece entre tu hierba,
mi alegría infantil
hoy olvidada,
la que con beso tibio recobraré
cuando duerma
en tu seno reposada.


Ycíar Rodríguez Bernardo

domingo, 21 de abril de 2013

sábado, 16 de marzo de 2013

La huella



Me decías que las olas
la arena envidiaba,
porque iban y venían
y mis pies besaban.

De tus bellas palabras
sólo queda la huella,
y a  la tristeza le pregunto
¿qué haré con ella?

Ycíar Rodríguez Bernardo

viernes, 1 de marzo de 2013

Anoche





Anoche
  
Anoche soñé contigo,
¡qué noche más insinuada!,
¡qué bien olían los montes
de mis montañas nevadas!
Nunca paz, dicha ni calma
llenaron tanto mi alma.
Anoche soñé contigo
y en tu pecho, relajada,
dejé dormir mi semblante
que tu mano acariciaba.
Miradas dulces y cálidas
de color verde enviabas
y melodías hermosas
a mi oído musitabas.
Mi corazón se hacía grande
sintiendo besada el alma
por el aura prodigiosa
que de tu cuerpo emanaba.
Anoche soñé contigo
y el albor oyó gemir a tu llanto,
llorabas porque marchaba,
reías porque volvía,
silbabas porque olvidabas.
Anoche soñé contigo
¿Dormida?
¡Despierta estaba!

Ycíar Rodríguez Bernardo

sábado, 5 de enero de 2013

Noche de Reyes


¡¡Colócamela cerca!!

 En el hogar del asombro
-en esta noche-,
en el hogar de la ilusión y de la fiesta,
has de dejar a mi inexperta mano
tu zapatilla cerca.
Colócala aquí, aquí a mi lado,
donde la pueda ver cuando te duermas,
donde pueda tropezar con mis anhelos,
donde mi ilusión y mi sonrisa se engendran.
Colócala en mis ojos, si me miras;
colócala en mi pelo, si me hablas;
colócala en mi pecho, si me quieres
y suéltala en mi alma, si me amas.
En el hogar del asombro
-en esta noche-
en el hogar de la ilusión y de la fiesta,
yo...he de llenar de paz tu zapatilla
y tú...,tú has de colocarla cerca.

Ycíar Rodríguez Bernardo